La tarta de queso es un postre muy popular. Por ello no es de extrañar que existan múltiples versiones y recetas de cada una de ellas. Nosotros hoy te propones una tarta de queso y manzana. Es un pastel de tipo frío, horneado y muy fácil de preparar. Sin embargo, te podemos asegurar que querrás repetir.
INGREDIENTES

- Galletas tipo maría integrales (medio paquete)
- Mantequilla o AVOE
- 300gr queso philadelphia light
- 45gr azúcar
- 3 manzanas
- canela
- 10gr azúcar
- 4 huevos
- esencia de vainilla
- 1 cucharadita de levadura química
ELABORACIÓN
BASE DE GALLETA
Empezaremos preparando nuestra base de galleta, ¿os acordáis de esos pasteles rápidos que vendían en el super? Casi todos llevaban una base de galletas y después de completaban con mouse de limón o chocolate o la famosa tarta de oreo… Pues bien, ya sabes lo que tienes que hacer 😉
Tritura tus galletas con ayuda de un robot de cocina y mézclalas con la mantequilla, previamente derretida.
Cubre el fondo de tu molde con la masa de galletas con ayuda de una cuchara.
Deja enfriar en la nevera o congelador, según la prisa que tengas. Con 2-3 horas en nevera es suficiente.
RELLENO
Lo primero es preparar la manzana así que lava, pela y corta tus manzanas. ¡Atento aquí! Dos de las manzanas las cortaremos a dados pequeñitos y la cocinaremos durante 3-5 minutos junto con un toque de canela y azúcar en el microondas. Puedes hacerlo en un cazo, versión tradicional, sin problema y con el mismo resultado. También puedes hacerlo sólo canela porque quedan buenísimas aunque no añadas azúcar. Lo hemos probado y a nosotros nos encanta. La otra manzana la vamos a cortar en láminas y la vamos a reservar para después cubrir nuestro pastel.
En el vaso de tu robot de cocina o en un bol de los de toda la vida vas a mezclar el resto de ingredientes: 4 huevos (recuerda añadirlos de uno en uno), queso, azúcar, esencia de vainilla, levadura. Batimos bien hasta conseguir una mezcla fina y homogénea.

UNIR Y HORNEAR
Vamos a precalentar el horno, 120ºC aproximadamente. Recuerda que cada horno es un mundo y que nadie conoce tu horno como tú.
Coloca sobre tu base de galletas los trocitos de manzana que habías preparado con azúcar y canela.
Vierte sobre ellos la mezcla del pastel propiamente dicho.
Coloca sobre la superficie las láminas de manzana que tenías guardadas para decorar. ¡Truco! Nosotros hemos colocado esta capa de manzana a mitad de horneado. Es decir, metemos el pastel en el horno y en lugar de dejarlo 30 minutos y olvidarnos. Lo hemos sacado a los 15 minutos, hemos colocado la capa de manzana que cubre la superficie, hemos espolvoreado una cucharadita pequeña de azúcar. Y hemos terminado de cocinar la tarta. Los tiempos no son exactos, vigila los bordes y que el interior esté bien cocinado. La prueba es introducir un palito y que salga limpio.
Deja enfriar, primero a temperatura ambiente y después en la nevera. A esta tarta de queso y manzana le sienta genial el frío 😉
